PARRA

CAMBIO PAPEL POR ÁRBOL

Son las 8:48 P.M. y sentí el impulso de salir de las cobijas a escribir, sí, ya sé que es temprano, pero cuando estoy de peleita con mi novio, el plan B es acostarme a la fuerza. Aunque no son precisamente los malos pensamientos, los que me han han disparado de la cama; intentaré resumir para echar el cuento:

resulta que hoy, antes de que hubiera cambio de luna salí a pasear con el mío, y depronto en las andanzas descubrimos un magnifico lugar, es una librería para niños, pero no cualquiera, porque he visto muchas, a decir verdad no es una librería propiamente dicha, es un local acogedor en donde se pueden comprar libros y juguetes, también stickers, juegos, poster, cuadros...etc.

No sé como describir el perfil de niño que estaría encantado de visitar esa tienda y hasta poder comprar algo, lo que sí confieso es que los personajes eran todos novedosos para mi, pertenecen a una moderna infancia, al menos eso creo; sólo retuve el nombre de Olivia, una cerdita con la que me identifiqué de entrada; pero es tan solo una de tantas! también recuerdo otro, un tal Charles, y a su hermana que no sé como es que se llama, total, intentando decsribir ese maravilloso mundo, me estoy desviando de lo que quiero escribir.

Entre los muchos objetos llamaron nuestra atención, unos juguetes muy parecidos a los que usaban(mos) los niños de antes: carretas hechas de palo, trenes, ambulancias y hasta patrullas de policia, todos en el mismo material, la dependienta al percatarse de nuestra emoción dijo: esos son los juguetes de la temporada, los que se van a usar en diciembre!

Luego de que salimos nos dedicamos a comentar lo bien ambientado del lugar, bastante oscuro para ser un lugar frecuentado por niños, pero eso supongo hace parte del misterio, y la afortunada idea de sus propietarios.

Todo empezó, cuando aqui en la cama recapitulaba el día y ahí sí caí en cuenta de las palabras de la muchacha del almacen: (eco) "hechas en palo"..."juguetes de la temporada"...

Sí, empecemos a hacer el descuento de todos los palos que talarán para fabricar la feliz navidad de unos pocos niños. Aqui en la cama no puedo hacer nada, pero mañana debo hacer algo por contribuir con la causa.

Se me ocurre dejar mi egoismo a un lado y aceptar la oferta que recibí de Bancolombia en estos días, en el sobre fisico donde me enviaron los soportes bancarios, me proponen que renuncie a recibir ésta en papel, a cambio de que ellos (el banco) se encarguen de sembrar un árbol y cuidarlo por mí durante tres años.

Este será mi arbolito de a cambio.